Toda la información para conocer los misterios de la ciudad luz
La historia de las Catacumbas de París se remonta a finales del siglo XVIII. A partir de 1809, las Catacumbas se abren al público con cita previa. Desde su creación, las catacumbas han despertado la curiosidad de miles de turistas. Las Catacumbas de París son una de las atracciones más fascinantes y misteriosas de la ciudad. Ubicadas en el subsuelo de la capital francesa, estas antiguas minas de piedra caliza fueron convertidas en osarios a finales del siglo XVIII y albergan los restos de más de seis millones de personas. En este artículo, te llevaremos a un viaje por la historia de las catacumbas, te daremos detalles sobre cómo llegar y te proporcionaremos recomendaciones para una visita inolvidable.
La historia de las catacumbas de París
A finales del siglo XVIII, cuando debido a los graves problemas de salubridad provocados por los cementerios de la ciudad se decidió trasladar sus contenidos a un lugar subterráneo. Las autoridades parisinas eligieron un lugar de fácil acceso, situado en la periferia de la capital: las antiguas canteras de Tombe-Issoire, bajo la Plaine de Montrouge. Las primeras evacuaciones tuvieron lugar entre 1785 y 1787 y afectaron al cementerio más importante de París, el Cementerio de los Santos Inocentes.
Es declarado «Osario municipal de París» el 7 de abril de 1786 y, es entonces cuando se apropia del término mítico de «Catacumbas», en referencia a las catacumbas de Roma, lugar que despierta gran fascinación pública desde su descubrimiento. A partir de 1809, las Catacumbas se abren al público con cita previa. En la actualidad, todo el mundo puede acceder a ellas sin necesidad de una autorización. Las Catacumbas de París reciben a casi 550 000 visitantes al año.
Información útil
Acceso: Por motivos de seguridad y de conservación del osario, se prohíbe el acceso a las Catacumbas de París con maletas o bolsas de gran tamaño. Solo se permite introducir bolsos con un tamaño máximo de 40 x 30 cm. Deberán transportarse delante o en la mano.
Como nuestro museo no dispone de consigna, no se aceptan equipajes.
Dato importante: el número de visitantes al lugar limitado a 200 personas. En caso de gran afluencia, es posible que se produzca una interrupción momentánea de las entradas. Duración media de la visita: 45 minutos. El recorrido de 1,5 km en sentido único. Entrada por el nº 1, Avenue du Colonel Henri Rol-Tanguy y salida por el nº 21bis, Avenue René-Coty.
Consejos para visitar las catacumbas
Acceso preferente: reserve con anticipación su ticket de forma online para evitar el tiempo de espera en las filas
Librería y Tienda: al final del recorrido descubra la librería que tiene muy buena bibliografía
Temperatura: La temperatura media es de 14° y el índice de humedad puede ser elevado.
Escalones: Las Catacumbas de París cuentan con un total de 131 escalones descendentes y 112 escalones ascendentes.
Fotografías: Está permitido tomar fotografías para uso privado, siempre y cuando no se utilice flash, trípode ni material voluminoso que pueda molestar a los demás visitantes.
Prohibiciones: por motivos de conservación del lugar, está prohibido beber o comer durante el recorrido y no se admiten los animales de compañía. Y, por supuesto, está prohibido tocar los huesos, que son los frágiles restos óseos de millones de parisinos.
Horarios
De martes a domingo de 09:45 a 20:30 horas. Las taquillas cierran a las 19:30 horas.
Las Catacumbas permanecen abiertas el 14 de julio, el 15 de agosto, el 1 de noviembre y el 11 de noviembre.
Permanecen cerradas los lunes y algunos días festivos: 1 de enero, 1 de mayo y 25 de december.
Tarifas
- Tarifa general: 29€ (con audioguia)
- Tarifa reducida (de 18 a 26 años) : 23€ (con audioguia)
- Tarifa mínima (5-17 años) : 10€
- 0-4 años : gratis (sin reservación)
Como llegar a las Catacumbas de París
Ingreso: se encuentra en: 1, Avenue du Colonel Henri Rol-Tanguy (Place Denfert-Rochereau) – 75014 París
Para llegar en Metro y RER B: Denfert-Rochereau
Para llegar en Autobuses: 38, 68
Aparcamiento privado: Boulevard Saint-Jacques Vélib’: 2, avenue René-Coty
Que ver en las Catacumbas de París
Exposición “Historia de los esqueletos”
La exposición «Historia de esqueletos», organizada en colaboración con el Inrap y la Drac Île-de-France, presenta los hallazgos arqueológicos realizados por el Inrap (Instituto Nacional de Investigaciones Arqueológicas Preventivas) en el antiguo cementerio del Hospital de la Trinidad, en el Boulevard Sébastopol, y revela sus vínculos con los huesos procedentes del mismo cementerio, ya instalados en el osario de las Catacumbas de París. Este tema permite evocar el origen de algunos sectores del osario de las Catacumbas y, a través de un enfoque científico, conocer mejor a estos parisinos que vivieron entre los siglos XV y XVII. ¿Quiénes eran? ¿Cuál era su edad, su sexo, en qué se basaba su alimentación y qué enfermedades sufrieron? ¿Qué epidemias padeció la sociedad urbana parisina del Antiguo Régimen? ¿Cómo poner en perspectiva esta nueva lectura de los restos humanos? Un buen número de preguntas a las que la exposición pretende dar respuesta a través de una iniciativa arqueológica y antropológica.
Esta exposición se puede ver actualmente en las Catacumbas de París, en la entrada al osario.
El mar en París
Esta exposición presentada en las Catacumbas de París propone poner en valor un aspecto desconocido del lugar: su patrimonio geológico, auténtico tesoro del subsuelo parisino. Revela al visitante los vestigios de una época, hace aproximadamente 45 millones de años, cuando la ciudad de París estaba ocupada por un mar tropical. ¿Quién pudiera nunca haberse imaginado que la capital francesa estuviera sumergida bajo el mar?
Más conocidas por acoger el osario municipal de París, las antiguas canteras de piedra para la construcción, comúnmente conocidas como «Catacumbas», son actualmente el único lugar de París donde es posible relatar la historia reciente de la Tierra in situ.
Los muertos de la Revolución Francesa
A través de reproducciones de obras del Museo Carnavalet se evocan eventos y personajes célebres del periodo revolucionario francés. El azar ha querido que en las Catacumbas reposen los restos óseos de víctimas y verdugos: Robespierre, Madame Élisabeth, Lucile Desmoulins, Fouquier-Tinville o Malesherbes.